Qué es el miedo?
La RAE nos dice que es la perturbación (ojo! No confundir per con mas, puede ser peligroso) angustiosa del ánimo por un riesgo o daño real o imaginario.
Son muchos los tipos de miedo: miedo a la muerte, a la enfermedad, a perder a alguien, a fracasar, al cambio, a la crítica, a enamorarse...
Por ejemplo, Pablo Alborán nos comenta en una canción que tiene miedo a perderte. Qué digo yo, miedo por qué? Ponle un GPS y listo.
Hace unos meses me fui corriendo de mi casa debido a una pequeña invasión de cucarachas. Qué digo yo, miedo de qué? Si huyen de ti cuál Usain Bolt en plena carrera!
Antes de comenzar mi viaje, todo el mundo me metía miedo con lo peligroso que es Latinoamérica al grito de: "Ten cuidado! Estás loca! Esos países son muy peligrosos! No tenías otro sitio dónde ir? Y tú sola por Dios! Eres el blanco perfecto: mujer, blanca y tontaca!" Bla, bla, bla…
Qué digo yo, por qué tanta insistencia con lo peligroso que es el mundo? Por qué tanta insistencia con lo mala que es la gente? Dos meses ya viajando y hasta el momento resulta que los malos no son tan malos. Resulta que por ser el blanco perfecto te ven más indefensa o no sé pero te ayudan, te protegen, te cuidan... Resulta que hasta el tío más chungo de una calle chunga se baja de la acera con gesto de “pase usted señorita”, cediéndote el paso cuál caballero andante.
Qué digo yo, por qué nadie me advirtió del verdadero miedo? Por qué nadie me dijo: "Irma, ten cuidado de los huecos y los rayos, son muy peligrosos. Ve con mucho cuidado!" Si señores, ni miedo a perderte, ni cucas, ni personas malas ni leches! Huecos y rayos! Repito, huecos y rayos! Este es el miedo del que nadie me habló antes de venir y que me ha puesto los pelos de punta aquí en Costa Rica y paralizado por unos segundos!
Malditos todos los que me dijisteis que iba a morir a punta de pistola cuándo casi muero por darme la hostia del siglo intentando evitar los rayos o los huecos de las carreteras!
Y aquí va la anécdota:
Malditos todos los que me dijisteis que iba a morir a punta de pistola cuándo casi muero por darme la hostia del siglo intentando evitar los rayos o los huecos de las carreteras!
Y aquí va la anécdota:
Dormirte en el bus.
Pasarte la parada.
Bajarte en medio de la carretera.
Comenzar la caminata de retorno.
No farolas.
No luz.
No nada.
No luz.
No nada.
Linterna olvidada en casa olé!
Ni un alma.
Sólo la oscuridad y tú en el camino.
Miedo a la oscuridad.
Miedo a que te asalten.
Miedos que en cuestión de segundos pasan a un segundo plano.
Huecos.
Huecos en la carretera del tamaño de un osobuco.
Huecos que te hacen bailar a modo chiquilicuatre.
Miedo a romperte la crisma y lo que no es la crisma.
Rayos.
Rayos que te iluminan el camino, bien!
Rayos que hacen visible los millones de huecos, muy bien!
Rayos que interrumpen el baile chiquilicuatre, olé!
Rayos, rayos y más rayos.
Rayos no de esos que ves a lo lejos y dices "alaaaaa que guay!"
No.
Esos son bonitos.
Esos están lejos, muy lejos.
Esos no molestan.
Esos impresionan.
Éstos son rayos que caen a un palmo de ti.
Éstos convierten la oscuridad más profunda en casi luz solar.
Éstos, además de los huecos, te dejan ver hasta los pelitos de las piernas.
Éstos, además de los huecos, te dejan ver hasta los pelitos de las piernas.
Pelitos que resistieron a la depilación.
Pelitos que no viste ni con la mejor luz.
Pelitos que no viste ni con la mejor luz.
Pelitos que te hacen odiar a esos tíos que pasan enfrente tuyo divinamente depilados.
Rayos que matan.
Rayos que matan.
Rayos que te dejan paralizada.
Rayos que llevan el resto de miedos a la nada.
Rayos que te hacen correr, correr cómo tus amigas las cucas.
Pero olvidas los jodíos huecos.
Pero olvidas los jodíos huecos.
Bailas chiquilicuatre.
Corres modo cuca.
Te paralizas cuál momia petrificada.
Vuelves a bailar, vuelves a correr y te vuelves a paralizar.
Así 50 veces más.
Una vez terminada la carrera, necesitas unos minutos para recuperar el aliento y las fuerzas. Estás paralizado, inmóvil. Te tiembla todo el cuerpo y lo único que te apetece es cagarte en todos aquellos que te metieron el miedo equivocado en el cuerpo! :P
Jajajajaja me parto eres única!!! Y nadie te grabo que pena perderme ese momento jajajaja
ResponderEliminarJajaja, joder, lo cuentas asi de guasa...pero acojona!! Menos mal q viviste para contarlo, jajaja.
ResponderEliminarMiedo el que siento yo ahora por leerte, cabeza loca!
ResponderEliminarAhora queda una anécdota divertida pero la verdad es que estaba cagaita de miedo.
ResponderEliminarGrabarme? Pero quién leches me va a grabar si no había ni Peter! Jajaja