Arenal Cerro Chato: Trepando Cráteres

21 Septiembre, semana de volcanes...

Nos encontramos en La Fortuna, pueblecito enclavado a las faldas de dos volcanes: Arenal (activo) y Cerro Chato (inactivo). El pueblo es turístico no, lo siguiente (cuenta con más hoteles que la capital que ya es decir) pero gracias a la maravillosa temporada baja, no está masificado de turistas resultándome un pueblo encantador con una paisaje maravilloso.

Aquí se pueden hacer miles de actividades: volcanes, cascadas, aguas termales, trekking, rafting, canopy etc... De todas ellas, yo decido empezar la semana con un trekking de 8h ascenciendo el Cerro Chato, estratovolcán inactivo desde hace 3500 años.

Gustándome siempre todo y queriendo hacerlo todo, que no se puede, la elección esta vez ha sido realmente fácil, veréis: después de la gran niebla del volcán anterior y en vistas a que me persigue allá dónde voy (Niebla 1 - 0 Irma), decido que ya que viene conmigo a modo koala, por lo menos sentirla cerca (soy una romántica jajaja) así que en vez de intentar ver el volcán desde una baranda dónde caen rayos malos que te destruyen, mejor ascenderlo hasta el mismo cráter (Niebla 1 - Irma 1). De toda la vida, si no puedes con el enemigo, únete a él! Y si me tiene que caer un rayo encima que al menos sea en un cráter y no en una mierda de baranda ;)

Del trekking diré que fue duro, intenso, emocionante, divertido pero sobre todo, espectacular!
Los que vengáis a la Fortuna, os guste la montaña, el senderismo y la naturaleza en estado puro, esta es vuestra excursión. Eso sí, hay que estar en forma porque el ascenso, fácil lo que se dice fácil no es, 3h por terreno empinado con pendientes cuál menos elegantes...

La primera parte cuenta con unas vistas increíbles del Arenal y todo el valle de San Carlos para adentrarte después al bosque y selva del volcán. Caminar por aquí rodeado de toda esa Naturaleza y con la niebla intentando perseguirte no tiene precio, la sensación de libertad es única (digo esto tan feliz porque esta vez mi amiga la niebla me deja ver. Si hubiera visto tan sólo un matorral, diría que la sensación de libertad es un mojón chin pum).

Terminado el duro ascenso sudando a más no poder, se alcanza el cráter y su laguna, dónde es posible bañarse e incluso cruzarla a nado cuál David Meca.

La segunda parte consiste en descender el volcán por el otro lateral. Interesante este descenso, con distintos tipos de terreno, llenos de barro hasta las orejas e inclusive con partes de escalada.

La tercera parte, ya más relajada, consiste en cruzar varios puentes colgantes, bañarse en la cascada de la muerte y llegar al observatorio del volcán Arenal para ver el atardecer.

Por último y alcanzada ya la noche, baño nocturno con linternas en las aguas termales del volcán.

Más datos:

- Precio: 65$ (temporada baja) pero yo lo conseguí por 55$.

- Empresa: Red Lava

- Duración: 10h - 20h

- Monitor: Erik (me encantó)

Checks de la excursión:

- Acender un volcán.

- Bañarse en la laguna de su cráter.

- Bañarse en ropa interior en la cascada: un agua cero al final de la excursión, estar calado de arriba y abajo y la pereza de ponerse el bikini en esas condiciones le llevan a una a hacer este tipo de cosas delante de gente que ha conocido ese mismo día, con total confianza ;)

- Cruzar por el centro de una cascada cuyos laterales pueden matarte, alcanzar el interior y sentirse más vivo que nunca, todo esto tan sólo unos minutos antes de que el caudal central se incremente casi al mismo nivel que sus laterales. Aunque escrito ahora asusta un poco, en el momento fue emocionante.

- Baño nocturno en las aguas termales que bajan del volcán.